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PALOMA PELAEZ BRAVO |
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Doctora en Bellas Artes UCM |
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VITA: 4º PROYECTO (Albarracín 2011) |
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“RETRATO Y PAISAJE” Integración de dos géneros |
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¿Es la pintura, toda sin distinción de género un simple autorretrato?
El retrato y autorretrato pictórico son la representación del yo enmascarado, son la presentación de aquella presencia invisible que se hace visible ante el espejo de tela. Sin embargo el retrato ante el paisaje genera una simbiosis entre estos dos géneros plásticos que van mucho más allá de la pura representación: el retratado se convierte en espacio vivo, se transforma en esencia de nuestra identidad. Es decir, el retrato ante el paisaje es más que una “revelación del personaje” ya que se convierte en existencia viva de un natural vivido y sublime.
“Esencia en el retrato: esencias retratadas y retratos” forman parte de las obras realizadas para el curso superior de pintura: “Paisaje y retrato. Integración de dos géneros”. También son el resultado de toda una reflexión e investigación -que durante siete años- se ha ido realizando tanto a nivel práctico como teórico, con el curso de doctorado “Del retrato observado al autorretrato. Posibilidades plásticas y expresivas” así como la línea de investigación: “Constantes plásticas del autorretrato en el arte actual” en la Universidad Complutense de Madrid.
Son personajes conocidos en mi más genuina cotidianidad: mi realidad familiar. Observar estos personajes reales y analizarlos ante el natural, me ha obligado a estudiar las relaciones de vecindad entre lo que creo conocer y aquello que me rodea. Para ello he estudiado como los personaje se mimetizan con el lugar; como se adaptan a la luz del entorno, a la existencia del paisaje que les rodea; como se enlazan, se superponen o se mantienen separados; como conversan y ponen voz a sus rostros a través de los colores, las luces y las sombras, las texturas y las formas.
Gracias a los elementos de la gramática pictórica, el retrato nunca ha dejado ser, y ahora más que nunca, una forma de explicar lo que somos en el espacio en el que actuamos. Por todo ello, estos retratos pintados -que ahora os presento- surgen de una necesidad: reivindican su lugar y su existencia, en un espacio en que lo global, hace perder lo individual. |
